Randle McMurphy (Jack Nicholson), un violador de espíritu libre, que
vie contracorriente, es recluido en un hospital psiquiátrico. La inflexible
disciplina del centro acentúa su contagiosa tendencia al desorden, que acabará
desencadenando una guerra entre los pacientes y el personal de la clínica con
la fría y severa enfermera Ratched (Louise Fletcher) a la cabeza. La suerte de
cada paciente del pabellón está en juego.
B-R-U-T-A-L.
¿Por qué?
Por todo: la historia, la forma
en que está contada, la perfecta unión entre banda sonora e imágenes, los
planos y por supuesto: las interpretaciones. Todas ellas: SOBERBIAS.
La película nos incita a que
reflexionemos. A que veamos que en todo lo que tomamos por “bueno” quizá no sea
tan bueno, y aquello que tomamos por “malo”,
a lo mejor no lo es tanto. En el personaje de Jack Nicholson encontramos
a un hombre que lucha por sus ideas, y con ello hace que otras personas (los
demás pacientes), lo intenten también.
(SPOILER) Con la muerte de Radle (J. Nicholson) vemos como quiere
reflejarse, que aunque el cuerpo muera, él alma va mucho más allá. También
apreciamos la opresión del sistema. Como todo aquel que no se adapta a las
normas establecidas es tomado por loco, y esto llega a tal punto, que las
propias personas piensan que deben estar allí, y por eso, permanecen por propia
voluntad. (FIN DEL SPOILER)
La película es capaz de llevarnos
de la comedia al drama. Nos transporta a un psiquiátrico en el que las cosas
que suceden, si lo piensas dos veces, se parecen mucho a la realidad. Te hace cuestionarte en algunos momentos ¿quiénes son los locos aquí?
Lo mejor: Jack Nicholson. Puede
decirse perfectamente que realiza uno de los mejores papeles de su carrera. Un
auténtico crack es este hombre.
Lo peor: Nada. Sólo que al ser
más antigua, hay gente que no tiene demasiado interés en verla, y QUÉ MAL HACEN.
Curiosidades:
- - Las principales opciones para el papel
protagonista fueron Marlon Brando o Gene Hackman. Ambos lo rechazaron y ambos
lo lamentaron tras el tremendo éxito de la película.
- - Jack Nicholson y Milos Forman (el director)
tuvieron varias peleas durante el rodaje a causa de las “diferencias
creativas”. Llegando la cosa a tal extremo que Nicholson abandonó el rodaje
durante dos semanas para alejarse del director. A su regreso, se negó a
dirigirle la palabra y durante el resto de la producción el director de
fotografía tuvo que hacer de intermediario.
- - La película se rodó en un verdadero hospital
psiquiátrico, en Oregón. Y muchos de los pacientes que aparecen en ella, eran
enfermos auténticos que participaron en el film sin saberlo. Esta situación dio
lugar a numerosas anécdotas ya que, los celadores a la hora de la comida, cena
o de ir a la cama no distinguían a los pacientes de los actores.
*Ganadora de 5 Oscars: Mejor película, mejor director (Milos Forman), mejor actor (Nicholson), mejor actriz (Fletcher) y mejor guión adaptado.
TRAILER
Puntuación: 4’5/5
Phoebe
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