Cuando vi esta película había
algo que hacía que no me gustase del todo, pensaba en el argumento y la forma
de llevar la historia, y la verdad es que no era eso lo que fallaba de verdad.
Está basada en una antigua leyenda celta.
Tristán (James
Franco) es un soldado que es dado por muerto durante la guerra entre Gran
Bretaña e Irlanda.
Arrojan su cuerpo al mar y es la princesa Isolda (Sophia Myles) la que le encuentra y le cuida hasta que puede volver a su tierra.Durante ese tiempo Tristan se enamora de ella sin saber que es la princesa del país enemigo.Se volverán a encontrar pero a partir de entonces deberán vivir su amor en secreto, pues no deben poner en peligro la paz de los paises por su amor.
Me da pena no haber podido
disfrutar del todo esta película porque es mi género favorito. La ambientación
está bien, refleja el frío y la humedad del clima perfectamente; pero los
actores, tanto Sophia Miles como James Franco me han decepcionado un poco. La
historia trata de un romance imposible y hay momentos en que parece que a Isolda
le da igual y Tristán no termina de trasmitirnos su dolor, pasión o cualquier
sentimiento…
Da la sensación de que han ido un
poco a lo fácil en la realización de esta película, pudiendo haber profundizado
más en los detalles sentimentales y darle un poquito más de emoción a la
historia.
A pesar de todo esto me parece un
trabajo de fotografía estupendo que nos mantiene entre lo real y el mundo de los
cuentos de hadas.
Lo mejor: La historia y la
fotografía.
Lo peor: Los actores
VALORACIÓN: 3/5
Terpsícore.